el hombre ‘orm’
El hombre “orm” que desde lo alto de su torre desciende.
come tierra entre murmullos de ascenso encapotados.
punto final. donde termina la palabra mar
en el reverso de la torre
de su torre.
a la deriva “orm” permanece lejano…
quizá, entre alguna tormenta de sueños bruscos, logre percibir
con cierta dificultad
aquel viejo ademán perdido
las notas echas de su cabello viajando incontenibles hasta sus besos
aquella tierna música al oído próxima…
pero nada más.
Y es por eso que esa noche será la de los lamentos perfectos
la de los silencios sin dueño trágicamente hallados…
cobijándose cautivos lejos de cualquier
amanecer.
finalmente, la penumbra se hará dueña de lo suyo; el cielo,
apenas podrá sostener el fulgor de una estrella de mar caprichoza
en tanto que la luna, aún seguirá recordando, íntegra, su belleza
ya extinta.
El hombre “orm” se ha confesado.
él estará ausente(traidor de su torre), quieto ya de lágrimas
ultraterrenas.
él se protegerá de estallidos(ya no hay tormentas resueltas)
y el enorme ejército bípedo claudicará.
De búsqueda sólo hay enfermos perpetuos.
la piedra que no tomó David.
2003