Panorama

Durante los primeros siete meses del año, el intercambio comercial aumentó 35%, y totalizó los US$ 46,700 millones, donde destacó el crecimiento de las exportaciones (35.4%) y de las importaciones (34.6%). El mayor ritmo exportador permitió un incremento de 38.8% en la balanza comercial, lo que generó un resultado positivo de US$ 5,020 millones. Sin embargo, el contexto de incertidumbre en el ámbito externo, causado por la crisis en Europa, se reflejó en una corrección a la baja de los términos de intercambio (que acumularon un incremento de solo 0.6%).

El esperado aumento de la actividad económica mundial, a ritmo más moderado que el previsto inicialmente, impactaría en una menor tasa de crecimiento del sector transable peruano. Según el Banco Central de Reserva, las exportaciones cerrarían el año con un incremento de 25.9%, mientras que las importaciones lo harían con uno de 28.6%. Lo anterior está en línea con la menor previsión de crecimiento del comercio mundial por parte de la OMC: de 5.8% para 2011 (versus el 6.5% esperado inicialmente), tras las inciertas perspectivas de la economía mundial.

Importaciones de Consumo

Los bienes de consumo representaron hasta julio de 2011 el 17.5% del total de importaciones, y sumaron US$ 3,512 millones, tras incrementarse en 23.6%, un reflejo de la continuidad del aumento del consumo privado (6.4% hasta el primer semestre del año), tras los incrementos en el ingreso nacional disponible, la mayor confianza del consumidor y el crecimiento del crédito y del empleo. Los bienes de consumo no durables aumentaron 28.3%, mientras que los duraderos lo hicieron en 18.7%.

Sin embargo, es de destacar que, en julio último, las importaciones de consumo desaceleraron su tasa expansiva, al crecer solo 14.2%, la menor tasa de los últimos 18 meses, en parte por la disminución de los precios de los principales commodities alimenticios importados.

Importaciones de Materias Primas

Hasta julio del presente año, las importaciones de insumos o bienes intermedios acumularon una expansión de 35.1%, y sumaron un total US$ 10,418 millones, principalmente por las mayores adquisiciones de materias primas destinadas a la industria (32.2%) y combustibles (12.7%). La mayor demanda de insumos reflejó la expansión productiva de la industria de bienes no primarios (7.4%), la que operó al 56% de su capacidad instalada. De otro lado, la importación de insumos destinados a la agricultura creció 25.9%.

Cabe destacar que, tras el periodo de incertidumbre generado por ciclo electoral, se evidenció una desaceleración en el aprovisionamiento de materias primas: hasta agosto, las importaciones crecieron 32%, y solo 7% si se considera los volúmenes adquiridos.

Importaciones de Bienes de Capital

Las importaciones de bienes de capital reportaron una expansión de 39.3% hasta los primeros siete meses del año, y sumaron un total de US$ 6,692 millones, debido principalmente a la continuidad de la inversión privada (15.6% hasta el primer semestre). Destacó el aumento de las adquisiciones de bienes de capital destinados a la industria (42.6%), materiales de construcción (59.6%) y de transporte (23.1%), aunque en algunos casos se evidenció una leve desaceleración.

En efecto, las importaciones de materiales de construcción fueron las que reportaron mayor disminución en el ritmo expansivo: de crecer 157.9% en mayo, redujeron su tasa a 42.7% en junio y reportaron una contracción de 13.7% en julio último. Lo anterior está en línea con la drástica desaceleración de la actividad constructora desde marzo pasado, conforme se acercaba el periodo electoral.