Mi novio y yo este verano quisimos hacer algo diferente que no fuera pasar tiempo navegando en Internet, queríamos practicar un deporte juntos. En un inicio pensamos salir a correr todas las mañanas, pero esa dinámica no creo que hubiera funcionado.

Al final optamos por alguna práctica que nos imponga más disciplina y al tener un horario fijo lo incluyamos dentro de nuestra rutina diaria. Revisamos las opciones y nos pareció más interesante llevar clases de tenis.

 

Antes de matricularnos tuvimos que elegir el nivel, encontramos una lista de opciones en el pizarrón del campo, pero a mi entender los niveles eran los siguientes.

 

Principiante. Nunca habían sujetado una raqueta.

 

Inicial. Al menos habían intentado jugar y han visto partidas de tenis antes.

 

Intermedio. Ya han jugado un tiempo y ya no son de inicial.

 

Avanzado. Jugadores experimentados que lanzan muy fuerte y no les puedes devolver la jugada al menos que corras como Bolt.

 

Bueno, elegimos el nivel Principante y las clases eran los martes y jueves de 8am a 9am. En una hora  debíamos poner a prueba nuestra coordinación y resistencia física.

 

Andábamos muy emocionados con el inicio de nuestras clases. al parecer  íbamos a superar nuestra afición a los juegos en línea.          Cuando este llegó asistimos muy puntuales con ropa deportiva súper cómoda, recogimos nuestra raqueta y nos dirigimos a la cancha número 3 en donde nos esperaba el instructor junto a dos alumnos más.

 

Contrario en lo que pensé en un inicio mi novio si podía raquetear, yo imaginaba que nunca iba a llegar a pegarle a la pelota, en verdad creo que lo subestimé un poco.

 

Todo el verano nos pasamos intentando aprender un deporte del que no conocíamos nada y solo practicábamos dos veces por semana, así que decimos regresar a ser “normales”.

 

Como andábamos un poco tristes porque no aprendimos a jugar como profesionales el tenis, mi novio me sugirió hacer un mini campeonato de tenis online entre los dos. No me pareció una mala idea jugar en Internet. Juegos friv

 

 

En verdad aquella experiencia fue genial, pues pasamos de un nivel principiante a un nivel avanzado en cuestión de horas. Incluso había veces en las que él me ganaba a mi y yo a él.

 

Cuando nuestros amigos nos preguntan ¿qué tal van en tenis? – Nosotros les repondemos:

 

Mi derecha va mejorando

No fallo ni un saque

Jugamos muchos sets a la semana

Ya ven cómo vamos mejorando 🙂