¿Sobrecarga de información? ¿infoxicación?
La evolución y desarrollo de las nuevas tecnologías y la Internet ha revolucionado la producción de datos e información, elevándolos a tal punto de llegar con una sobrecarga al usuario, y afectando de forma indirecta la comprensión y procesamiento de los mismos.
El exceso de información es conocido como “Infoxicación“, o también llamado en inglés “Information Overload“. Las personas más propensas a sufrir de este mal son aquellas que reciben abundante información al día y prefieren la cantidad a la calidad de lo recibido. Además de las personas que se conectan a la web con sintomas de ansiedad.
“Demasiada información limita nuestra capacidad para comprender. Para procesar mucha información hay que saberla dominar. Sólo alguien que ha profundizado en una materia, que ha leído mucho sobre el tema, puede procesar rápidamente información: sabe lo que es cierto, lo que es probablemente cierto, y lo que es obviamente falso. Para procesar con rapidez información hay que tener mucho conocimiento previo sobre el tema”. Señala Alfons Cornella en su artículo “Infoxicación“.
Cornella también señala cómo identificar a una persona ‘infoxicada’: “uno está infoxicado cuando no puede absorber más información, cuando todo lo que hace es remitir la información que recibe a otros, a sus amigos, a sus contactos en las redes sociales. Pero hay un síntoma incluso más claro: estás infoxicado cuando te resulta difícil leer un texto de forma pausada, palabra a palabra; cuando lees saltando palabras, porque te has acostumbrado a leer así en diagonal. Estás infoxicado cuando lees sin entender lo que lees”.
Sabemos que la información en la web es abundante y nunca cesa, sin embargo podemos recurrir a diversos métodos para filtrarla, como usar navegadores especializados, buscar en sitios reconocidos y de prestigio, comparar la información recibida, establecer sitios de confianza, curación de contenidos, entre otros.