El papa Francisco ha nombrado nuevo arzobispo metropolitano de la arquidiócesis peruana de Cusco a Richard Daniel Alarcón Urrutia, que sustituye en este cargo a monseñor Juan Antonio Ugarte Pérez.
La Santa Sede informó del nuevo nombramiento mediante un comunicado en el que se especificó que la renuncia de Ugarte Pérez se produce en conformidad al artículo 401 del Código de Derecho Canónico, que establece que los obispos que superen los 75 años deben presentar su renuncia al papa.
El nuevo arzobispo de Cusco, de 62 años, nació el 10 de abril de 1952 en La Victoria- Lima, donde cursó la escuela primaria para continuar la carrera sacerdotal ingresando en la Orden de los Franciscanos Menores.
Posteriormente se matriculó en la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima, donde estudió Filosofía y Teología.
Tomó los votos solemnes el 15 de mayo de 1976 y fue ordenado presbítero el 8 de diciembre del mismo año.
La nota especificó que como presbítero ha sustentado los cargos de párroco de San Francisco y ecónomo del Convento de los Franciscanos de Cusco, maestro de postulantes en el Convento de San José Obrero en Arequipa, guardián y maestro de postulantes en el Convento de Santa Bárbara, en Juliaca.
También ha sido maestro en el Convento de San Francisco en Lima, párroco de San Cristóbal en Palcamayo, administrador apostólico de la diócesis de Tarma y, desde 1993 hasta 2001, vicario general de dicha diócesis.
Alarcón Urrutia fue nombrado obispo de Tarma el 13 de junio de 2001, diócesis que deja ahora para ocuparse del gobierno pastoral de Cusco.
Actualmente es presidente de Cáritas en Perú y miembro del Consejo Permanente del Episcopado.
Fuente: Agencia de noticias EFE.
Arquidiócesis de Cusco
Vicente de Valverde y Alvarez de Toledo
Por José María González Ochoa- Real Academia de la Historia.
Nació en Oropesa (Toledo), 1502 y falleció en la Isla de Puná (Perú), 1542. Dominico, primer obispo de Cusco y America del Sur.
A los veintidós años ingresó en la Orden de los Dominicos en el Convento de Salamanca. Se sabe que en 1529 estaba en Trujillo cuando Francisco Pizarro visitó la ciudad para reclutar hombres para la conquista de Perú y se unió a él. Se convirtió así en el capellán de la hueste y en uno de los más influyentes consejeros del conquistador.
Participó en todo el proceso de preparación del viaje y desembarco en tierras peruanas. Una vez en Cajamarca fue el encargado de recibir al Inca Atahualpa durante la crucial tarde del 16 de noviembre de 1532.
Valverde salió al encuentro del Soberano junto al intérprete, mientras el resto de las tropas españolas permanecían escondidas. El fraile pidió a Atahualpa que le acompañase a cenar con Pizarro, pero éste se negó, luego le hizo una lectura abreviada del Requerimiento y le entregó la Biblia al Inca, que, asombrado y temiendo un sortilegio, la arrojó al suelo. En ese momento huyó Valverde y salió en estampida la caballería de Pizarro.
Los meses que Atahualpa estuvo preso en Cajamarca, el dominico trató de instruirlo en la fe católica, al tiempo que aconsejaba al angustiado y dudoso gobernador que ejecutara al Inca. El fraile estaba convencido que el Inca conspiraba para matar a los españoles y le tenía horrorizado que se acostase con sus hermanas, algo tradicional en la nobleza incaica.
Valverde, como miembro del tribunal que lo juzgó, firmó la sentencia de muerte de Atahualpa, a quien paradójicamente bautizó y asistió en sus horas finales, oficiando después su funeral y la misa de difuntos.
Durante toda la conquista y posterior colonización de Perú el dominico tuvo mucha influencia en Pizarro, pues el conquistador acudía a él en sus momentos de dudas y consultaba tanto sus inquietudes espirituales como cuestiones tan prosaicas como la parte de los botines que debía entregar a cada soldado.
Después de la toma de Cuzco, instaló allí una pequeña capilla consagrada a Nuestra Señora de la Concepción, sobre la que un siglo más tarde se levantaría la espléndida Catedral de la ciudad. Aquel humilde adoratorio era el comienzo de la Iglesia peruana.
En 1535 recibió Valverde el cargo de obispo de Cusco y protector de los indios. A pesar de su comportamiento frente a Atahualpa, fue un convencido defensor de los indígenas peruanos, especialmente después de la sublevación de Manco Inca, cuando comprendió que la guerra y la dominación hispana estaban provocando la devastación de los poblados indios. Desde su cargo procuró que se cumplieran las instrucciones dadas por la Corona para proteger a los indígenas, y siempre que tuvo ocasión denunció, multó y encarceló a varios españoles por el maltrato dado a sus indios. También intentó salvaguardar a muchas comunidades nativas, sobre todo en la región de Jauja y en su obispado. Como sus gestiones tuvieron poco éxito, denunció en varias cartas enviadas al Emperador la despoblación terrible que experimentaba el Perú desde la llegada de los españoles. Su buen quehacer se vio truncado por el asesinato de su amigo Pizarro (junio de 1541). Al enterarse del magnicidio, temiendo por su vida, huyó de Cuzco y se embarcó hacia Panamá. Durante una pequeña escala en la isla de Puná, fue atacado por los indios caníbales que lo mataron y devoraron.
Bibliografía: J. Santiesteban Ochoa, “Fray Vicente de Valverde, protector de los indios, y su obra Cuzco”, en Revista de Letras (Cuzco), año 1, n.º 2 (1948); J. M.ª González Ochoa, Quién es quién en la América del Descubrimiento, Madrid, Editorial Acento, 2003.
Episcopologio
RICHARD DANIEL ALARCÓN URRUTIA
Nació en Lima el 10 de abril de 1952. Ingresó a la Orden Franciscana en el año 1969. Sus Estudios Filosóficos los realizó en Cusco en el estudiantado franciscano de La Recoleta. Sus Estudios Teológicos los realizó en la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima.
Emitió la profesión solemne, en la Orden de los Frailes Menores, el 15 de mayo de 1976 y fue ordenado sacerdote el 08 de diciembre de 1976.
Ejerció su ministerio sacerdotal como Párroco de la Parroquia San Francisco del Cusco y luego se dedicó a la formación de los postulantes, filósofos y teólogos. Fue Guardián y Maestro de postulantes en el Convento de Santa Bárbara en Juliaca, Puno (1979-1981), Vice-Maestro de Profesos temporales (Teólogos) de la Casa de Formación del Convento de San Francisco en Lima (1982).
El 20 de abril de 1993 obtuvo el indulto de salida de la Orden Franciscana, incardinándose en la Diócesis de Tarma.
Se trasladó a la Diócesis de Tarma como sacerdote misionero y se quedó hasta incardinarse como sacerdote diocesano. Ha trabajado como Párroco de la Parroquia de San Cristóbal de Palcamayo, (1983-1989), fue Administrador Diocesano de la Diócesis de Tarma (1990-1992), Párroco de la Catedral “Santa Ana” de Tarma (1993-1996), Párroco de la Parroquia de San Miguel Arcángel de Ulcumayo, (1996-2001), y fue responsable de la Comisión Diocesana para los laicos, (1999-2001). Además fue Vicario General de la Diócesis de Tarma.
El 13 de junio del 2001 fue nombrado Obispo para la Diócesis de Tarma, recibiendo la Ordenación Episcopal, el 21 de julio sucesivo, fecha en la que tomó posesión canónica de la Diócesis.
Desde Enero de 2012 es el Presidente de Cáritas del Perú y en la 104a Asamblea Plenaria Extraordinaria de la Conferencia Episcopal ha sido elegido miembro del Consejo Permanente.
El 27 de Octubre de 2014, su Santidad el Papa Francisco, le nombra como Arzobispo del Cusco, cuya toma de posesión fue el día 03 de Enero de 2015.
Juan Antonio Ugarte Pérez: Nació en Lima el 23 de setiembre de 1938. El 27 de agosto de 1967, recibe la ordenación sacerdotal por la imposición de manos del Obispo de Segovia, incardinándose en el Opus Dei y obtiene el Doctorado en Derecho Canónico en 1968, año en que regreso al Perú. En 1983 colabora con el Arzobispado de Piura, prestando sus servicios como Canciller. Ese mismo año el Santo Padre lo nombra Obispo, y recibe la plenitud del sacerdocio el 2 de octubre, de manos de Monseñor Mario Tagliaferri, Nuncio Apostólico del Perú. Prestó servicios episcopales en la Diócesis Abancay (1983-1986), en la arquidiócesis del Cusco (1986-1991) y en la Prelatura de Yauyos (1991-2004). El 29 de noviembre del 2003 se hizo público su nombramiento como Arzobispo del Cusco y asume el nuevo encargo el 30 de enero del 2004. Ha sido presidente de la Comisión Episcopal de Liturgia (dos períodos) y de la Comisión Episcopal de Familia (dos períodos). Fue elegido miembro del Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal y el 2006, delegado ante el CELAM. En el año 2013, al cumplir los 75 años de edad, presentó su renuncia al arzobispado del Cusco, según el canon 401, 1 (por límite de edad); dicha renuncia le fue aceptada al nombrar nuevo Arzobispo a Monseñor Richard Daniel Alarcón Urrutia el 28 de octubre de 2014. Monseñor Ugarte permaneció como Administrador Apostólico del Cusco hasta la toma de posesión de esta sede por Monseñor Alarcón, el 03 de enero de 2015.
Alcides Mendoza Castro: Nació el 14 de marzo de 1928, recibió el Orden Presbiteral el 15 de septiembre de 1951. Fue consagrado Obispo el 6 de julio de 1958, convirtiéndose en el obispo más joven del mundo. Participó en las cuatro sesiones del Concilio Vaticano II siendo el obispo más joven de este evento, con sólo 34 años de edad. El 5 de octubre de 1983, Juan Pablo II lo nombró Arzobispo del Cusco. En 1985 recibió la visita del Beato Juan Pablo II a la Arquidiócesis y al actual Benedicto XVI cuando fue Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, en 1986. En 2008 cumplió 50 años de misión episcopal y el 7 de junio del mismo año el entonces presidente del Perú lo condecoró con la Orden al Mérito por Servicios Distinguidos en el Grado de Gran Cruz. Su lema episcopal: «Cum Maria Matre Iesu: Con María, la Madre de Jesús». Tras padecer con fortaleza heroica un doloroso cáncer, su “dies natalis”, donde entró en la casa del Padre, le llegó el 20 de junio de 2012. Falleció en Lima, habiendo recibido los Santos Sacramentos y la Bendición.
Luis Vallejos Santoni: Trasladado del Callao el 16 de marzo de 1975; murió el 08 de junio de 1982.
Ricardo Durand Flórez SJ: Nació en Ambo, Huánuco el 16 de abril de 1917. Ordenado Sacerdote el 18 de diciembre de 1948. Electo al Cusco el 14 de febrero de 1966, consagrado como Arzobispo del Cusco el 25 de marzo de 1966. Trasladado al Callao el 14 de enero de 1975. Renunció el 16 de agosto de 1995.
Carlos María Jurgens Byrne CSSR: Preconizado el 17 de diciembre de 1956; trasladado a Trujillo en 1965; murió en Lima el 06 de junio de 1980.
Felipe Santiago Hermoza y Sarmiento: Preconizado en 1935; primer Arzobispo del Cusco en 1943; trasladado como Arzobispo titular de Berea y Vicario General Castrense en 1956; renunció en 1967; murió en Lima en 1980.
Pedro Pascual Farfán de los Godos: Trasladado de Huaraz en 1918; promovido a Lima en 1933; murió en 1945.
Fray José Gregorio Castro OFM: Preconizado en 1910; renunció en 1917; murió en 1924.
Juan Antonio Falcón: Preconizado el 19 de enero de 1893; murió en 1909.Pedro José Tordoya Montoya: Obispo titular de Tiberiópolis; trasladado a Cusco en 1873; renunció en 1880; murió en 1883.
Julián de Ochoa: Preconizado en 1865; renunció en 1874.
Eugenio Mendoza Jara: Preconizado el 17 de setiembre de 1838; murió en 1854.
Fray José Calixto de Orihuela OSA: Trasladado el 28 de junio de 1821; renunció en 1826; murió en 1841.
José Pérez de Armendáriz: Preconizado en 1805; murió en 1819.
Juan Manuel Moscoso y Peralta: Trasladado de Tucumán en 1779. Promovido a Granada en 1783.
Bartolomé María de las Heras: 1783; promovido a Lima en 1805; murió en 1823.
Agustín de Gorrichátegui: Preconizado el 16 de diciembre de 1769 a 1776.
Juan de Castañeda: Trasladado de Panamá desde 1749 a 1752.
Manuel Jerónimo de Romaní y Carrillo: Trasladado de Panamá desde 1763 a 1768.
Pedro Morcillo Rubio de Auñón: Trasladado de Panamá en 1742; murió en 1747.
Juan de Sarricolea y Olea: Trasladado de Chile el 05 de mayo de 1734 a 1740.
Fray Bernardo Serrada: Preconizado el 19 de diciembre de 1725 a 1733.
Fray Gabriel de Aguirre: Trasladado de Buenos Aires el 14 de enero 1716 a 1724.
Melchor de la Nava y Moreno: Preconizado el 09 de mayo de 1712 a 1714.
Juan González de Santiago: Preconizado el 09 de febrero de 1705; murió el 12 de diciembre de 1707.
Manuel de Mollinedo y Angulo: Preconizado el 15 de diciembre de 1670; murió el 12 de diciembre de 1699.
Fray Martín de Montalvo OSA: Preconizado el 29 de abril de 1669; no se hizo cargo.
Bernardo de Izaguirre de los Reyes: Trasladado de Panamá el 31 de julio de 1662; murió el 17 de marzo de 1670.
Agustín de Sandoval: Preconizado el 17 de noviembre de 1659, no se hizo cargo; murió en abril de 1661.
Pedro de Ortega Sotomayor: Preconizado el 27 de noviembre de 1651; murió en 1658.
Juan Alonso de Ocón: Preconizado el 11 de agosto de 1643 a 1651.
Diego de Montoya: Preconizado el 15 de junio de 1640, no tomó posesión.
Hernando de Vera: Preconizado el 20 de abril de 1629; murió el 09 de noviembre de 1638.
Lorenzo de Grado: Trasladado de Paraguay el 18 de marzo de 1619 a 1627.
Fernando de Mendoza SJ: Preconizado 12 de enero de 1609 a 1616.
Antonio de la Raya: Preconizado el 06 de junio de 1594 a 1606.
Fray Gregorio de Montalvo: Preconizado el 06 ó 16 de noviembre de 1587; murió el 11 de diciembre de 1592.
Sebastián de Lartaun: Preconizado el 04 de septiembre de 1570 a 1583.
Luis Matías Pinelo de Mora: Preconizado el 12 de febrero de 1565.
Francisco Ramírez: Preconizado el 06 de julio de 1562, murió en 1564 sin tomar posesión.
Sebastián Carviago o Carriago: Nombrado en 1562.
Fray Juan Solano OP: Preconizado el 18 de febrero de 1544; renunció en 1561; murió en 1580.
Fray Vicente de Valverde OP: Preconizado en 1537; murió en 1541.
Fuente: www.arzobispadodelcusco.org
MONSEÑOR PEDRO PASCUAL FARFÁN DE LOS GODOS
Por Fredy Medrano Fernández Baca.
XXVIII Arzobispo de Lima, Primado del Perú y Vicario General de las Fuerzas Armadas. Nació en la ciudad del Cusco el 23 de Octubre de 1870, sus padres fueron Máximo Farfán y Antonia Pascual. Estudió en el Seminario San Antonio Abad, ordenándose de sacerdote el 29 de Diciembre de 1894; celebró su primera misa el 6 de Enero de 1895. Fue párroco de Belén, profesor y Vice-Rector del Seminario, Promotor de Justicia. Presentado para el Obispado de Huaraz en 1906, se consagró en la Basílica de Nuestra Señora del Rosario el 15 de Diciembre de 1907. Habiendo entrado en la ciudad de Huaraz el 23 de Enero de 1908.
Celebró el primer Sínodo, creó el Seminario de San Pedro Pascual de Carhuaz, dio a la Catedral la Regla Consueta, visitó dos veces y a caballo toda su extensa y accidentada Diócesis hasta llegar a las márgenes del río Marañón y a lugares jamás visitados por prelado alguno.
En Abril de 1918 S.S. Benedicto XV lo promovió al antiguo Obispado del Cusco, saliendo de Huaraz el 14 de Julio de ese año. Ingresó a la histórica sede el 18 de Octubre.
En este Obispado reorganizó la Curia y el Seminario, practicó la visita pastoral en toda su vasta extensión incluyendo el departamento de Apurímac. En 1919 celebró el IV Sínodo. En 1921 conmemoró el Centenario de la Independencia con la entrada de la Cruz de la Conquista y la celebración del Congreso Interdiocesano de A.S. En 1922 celebró el V Sínodo exclusivamente para “remediar las múltiples necesidades de los HH. Autóctonos”. Desempeñó durante ocho años la Presidencia del Patronato de la Raza Indígena. En 1926 el Consejo Provincial del Cusco le otorgó el título de “Hijo Ilustre” como reconocimiento a su brillante labor pastoral y a sus eminentes dotes intelectuales. En 1927 hizo la visita Ad-limina Apostolorum, habiendo sido recibido por S.S. Pío XI con muestras de particular deferencia. En 1928 celebró el Primer Congreso Eucarístico Diocesano que fue el Primero del Perú. En 1932 cumplió sus Bodas de Plata Episcopales, siendo honrado por este motivo por S.S. el Papa con los títulos de Prelado Doméstico y Asistente al Sacro Sello Pontificio y con una honrosísima carta autógrafa.
En 1933 Coronó canónicamente la venerada imagen de Nuestra Señora de Belén, Patrona del Cusco, siendo promovido en septiembre de este mismo año a esta Sede Arzobispal Primada, en la que no obstante su ya avanzada edad y sus 28 años de episcopado, como en sus mejores años, hizo derroche de celo y energías durante los doce años que duró su gobierno Arzobispal, mostrando en todo momento sus grandes condiciones de Prelado según el corazón de Jesús: celoso, vigilante, sagaz y prudente y a la vez dotado de admirable don de gentes y de un probado espíritu de sacrificio. Promulgó el VIII Concilio Limense, celebró el XIV Sínodo Arquidiocesano; reorganizó “El amigo del Clero” y en 1935, le cupo la suerte de celebrar en forma digna y grandiosa el Primer Congreso Eucarístico Nacional que tuvo la virtud de prender en toda la extensión de la patria el fuego eucarístico y despertar la conciencia católica de los peruanos, llamándolos urgentemente a la organización de la A.C. En 1936 acometió resueltamente la magna obra del Seminario de la Magdalena que perpetuará su santa memoria. “Señor de la palabra”, supo lucir su magnífica oratoria en acontecimientos memorables nacionales y extranjeros. En el Congreso Internacional de Buenos Aires y en el celebrado en Medellín, Colombia, puso muy en alto el prestigio de su patria, a la que amaba. En vista del notable crecimiento del área urbana de Lima erigió parroquias en distintas zonas.
El 17 de septiembre de 1945 a horas diez y media de la mañana en medio de la consternación general y cuando los campanarios tocaban plegaria, entregó su alma al Creador, pobre y santamente en una habitación del Hospital Arzobispo Loayza. Antes, cuando le fue anunciada su muerte por el Nuncio de S.S. había exclamado como otro Toribio de Mogrovejo: IN DOMUN DOMINIO IBIMUS.
Pocos días antes se anunciaba desde Roma su próxima elevación a la Sagrada Púrpura. Dios se reservó concederle otro galardón eterno. Estuvo condecorado por el Rey de España con la Gran Cruz de Isabel la Católica, por el Gobierno de Venezuela con la Orden del Libertador y por la de su patria con la Gran Cruz de la Orden del Sol.
Fuente: Diario el Comercio Domingo 15/12/57.
SERMONES ORIGINALES DE MONSEÑOR PEDRO PASCUAL FARFÁN QUE SE GUARDAN EN LOS ARCHIVOS DE LA ARQUIDIÓCESIS
1.- III Centenario de la Fundación del Seminario Conciliar de San Antonio Abad del Cusco.
Capilla de San Antonio Abad–Cusco-1898.
2.- Exaltación al Solio Pontificio del Santo Pontífice Pío X . Catedral del Cusco–1903.
3.- Centenario de la Muerte de Santo Toribio. Cusco–1906.
4.- Reconstrucción de la Alocución Pronunciada el día de la toma de posesión.
Catedral–Cusco, 18 de Octubre de 1918.
5.- Oración Patriótica. Salón de Artesanos–Cusco, 1919.
6.- Transmisión de mando de la Unión Católica de Señoras. Cusco, 25 de Diciembre de 1920.
7.- Centenario de la independencia del Perú, Inauguración del Congreso Interdiocesano de Acción Social. Cusco, Julio de 1921.
8.- Discurso con motivo de la visita del Embajador Carlos Pietropaoli. Cusco, 22 de Agosto de 1921.
9.- Virgen de las Mercedes en el día de su coronación. Cusco, 24 de Septiembre de 1921.
10.-Transmisión de mando de la Unión Católica de Señoras. Cusco, Diciembre de 1921.
11.-Muerte de S.S. Benedicto XV, Oración Fúnebre. Catedral del Cusco, 1922.
12.-Pascua de Resurrección de Nuestro Señor y III Centenario de la Canonización de Santo Tomás de Aquino. Catedral del Cusco, 2 de Abril de 1924.
13.-Canonización de Santa Teresita del Niño Jesús. Templo de Santa Teresa-Cusco, 3 de Septiembre de 1925.
14.- Oración Fúnebre por la Caída en Puno del Aviador Velasco Astete. Cusco, 1 de Octubre de 1925.
15.- VII Centenario de San Francisco de Asís. Catedral- Cusco, 1926
16.- Establecimiento de la Festividad de Cristo Rey. Catedral – Cusco, 31 de Octubre de 1926.
17.- Aniversario de Pío XI y Oración Pro México. Catedral–Cusco, Enero de 1928.
18.- Inauguración de la Basílica Menor. Cusco , 24 de Septiembre de 1928.
19.- Sermón Eucarístico. Cusco, 24 de septiembre de 1928.
20.- Primer Congreso Eucarístico del Perú. 1928.
21.- XXXII Congreso Internacional de Buenos Aires. Palermo, 11 de Octubre de 1934.
22.- Reconstrucción de la alocución dirigida con motivo de una renovación de votos religiosos. 21 de Diciembre de 1934.
23.- Alocución con motivo de la visita del Presidente de la República al Seminario Santo Toribio al concluir el Congreso Eucarístico. Lima, 1934.
24.- Primer Congreso Eucarístico Nacional – Radio Difusora. Lima, 30 de Septiembre de 1935.
25.- Primer Congreso Eucarístico Nacional. Plaza Dos de Mayo – Lima, 23 de Octubre de 1935.
26.- Nuevo Local del Seminario de Santo Toribio, Bendición de la Primera Piedra. Magdalena–Lima, 19 de Marzo de 1938.
27.- Asamblea Episcopal sobre el Protestantismo. Arequipa, 7 de Noviembre de 1940.
28.- Mensaje Radial después del Terremoto. Lima, 1940.
29.- Exhortación al Clero en el 35 Aniversario de la Consagración Episcopal. Lima, 15 de Diciembre de 1942.
30.- III Congreso Eucarístico Nacional a realizarse en Trujillo. 1943.
31.- Solución al problema Indígena. Lima 6 de Julio de 1945.
32.- IV Centenario del Nacimiento del Inca Garcilaso de la Vega.
33.- Bendición de la Ampliación del Hospital de Belén.
34.- Discurso de Toma de Cargo como Presidente de la Acción Católica Peruana.
35.- Jubilación Doctor Medina.
36.- Fiesta Cristo Rey.
37.- Clausura del Seminario.
38.- Sermón sobre el Sagrado Corazón y el Espíritu Social de Sacrificio.
39.- Panegírico del Sepelio del Señor Aranibar.
40.- Panegírico del Sepelio del Señor Aguilar.
41.- Fiesta del Cusco.
42.- Sermón sobre Santa Clara.
43.- Sermón sobre la Virgen del Rosario.
44.- Verdadera y única Solución de la Cuestión Social.
45.- Alocución en el Congreso Eucarístico de Trujillo
46.- Plática Nupcial.
47.- Clausura del Seminario San Antonio Abad del Cusco.
48.- Coronación de la Virgen del Rosario del Cusco.
CALUMNIA REALIZADA AL MONSEÑOR PEDRO PASCUAL FARFÁN
El 31 de Octubre de 1918 en los diarios LA VERDAD y EL COMERCIO, se lanzaron acusaciones contra el Monseñor Pedro Pascual Farfán, aduciendo que se había apoderado de un collar de perlas de la parroquia de Santo Domingo de Yungay, manchando su honorabilidad y generándole muchos sinsabores.
Después de muchas investigaciones, no tardaron las sospechas contra el Presbítero Don Pedro González Arribas, sacerdote español, quien había falsificado el inventario de la parroquia de Yungay, y que esta se comprobó fácilmente con la presentación del libro original de inventarios realizado por el señor Francisco Turria, que después de dicho acto le entabló querella criminal ante el Juez de Primera Instancia.
El Presbítero González al no tener ninguna escapatoria, optó por la fuga muriendo en el camino para Moro por donde se dirigía para abordar un vapor en el Puerto Samanco.
El levantamiento de cadáver lo realizó el sacerdote español Santiago Aspe, encontrando el collar de perlas en el bolsillo del difunto, y verificando con el documento del inventario que ciertamente se trataba del collar que se le acusaba de robo falsamente al Monseñor Pedro Pascual Farfán.
Fuente: Archivo Arzobispal del Cusco Caja: Periódicos, Recortes, Sermones y Correspondencias de Monseñor Pedro Pascual Farfán.