Archdiocese of Kuala Lumpur

[Visto: 591 veces]

El nombre de Dios

El derecho a utilizar la palabra “Allah” esta limitado sólo al semanario católico Herald Malasya, pero no se aplica a la Biblia, a la misa y a otros actos religiosos en los cuáles debería poder ser usada sin infringir la ley. Es lo que subraya el arzobispo de Kuala Lampur, monseñor Julián Leow, en una carta pastoral publicada en el sitio web de la arquidiócesis. El prelado vuelve sobre la controversia jurídica que ha replanteado el padre Lawrence Andrés, confirmando que la batalla jurídica puede darse por concluida con la sentencia de la semana pasada, porque “ya hemos seguido todas las vías legales”.  Sin embargo la sentencia de la Corte de apelaciones ha “limitado sólo al Herald, mientras no considera todas las demás actividades y publicaciones de la Iglesia católica”.

El pasado 21 de enero el tribunal federal de Malasia ha respondido por enésima -y última- vez el recurso presentado por la Iglesia católica, que intentaba llevar hasta la Corte suprema la demanda relativa al uso de la palabra “Allah” también por los no musulmanes. Los cinco jueces que constituían el jurado han votado por unanimidad, negando la posibilidad de ulteriores acciones legales porque “no hay errores procedimentales” en los precedentes grados del juicio.
En la carta pastoral monseñor Leow recuerda que el derecho de usar “Allah” no contempla la Biblia o la misa, las sesiones de oración y adoración. “El gobierno ha dicho que la decisión de la Corte de apelaciones -añade el presidente de la Conferencia episcopal de Malasia- está limitada al caso llevado por el Herald. Y nosotros debemos tomar las palabras del gobierno”.

El prelado no esconde la posibilidad incierta sobre el futuro y las posibles repercusiones por la decisión del juicio, en particular en cuanto concierne a los derechos de las minorías y la libre practica del culto. Sin embargo, los católicos somos gente de “fe y esperanza”, por esto continuaremos en la lucha por el derecho y seguiremos sólidos en la búsqueda de la justicia y la verdad.
“Debemos defender los derechos de las minorías y de quienes no tienen voz -advierte el arzobispo de Kuala Lampur- y debemos perdonar e ir al encuentro del otro con amor, en particular, los que no entienden o son mal informados”. El prelado concluye recordando que las restricciones impuestas por el ministerio del interior sobre el uso de “Allah” al Herald son inconstitucionales, pero es sólo a través del amor que venceremos en la batalla y “Dios es amor”.

En Malasia, nación de 28 millones de habitantes en su mayoría musulmanes (60%), los cristianos son la tercera confesión religiosa (tras los budistas) con un número superior a 2.6 millones; la publicación de un diccionario latino-malayo de 400 años de antigüedad demuestra como, al comienzo, el término “Allah” era usado para definir a Dios en la Biblia en lengua local. Sobre una población de otros 11 millones de personas, los católicos de Kuala Lampur son 180 mil; los sacerdotes son 55, los religiosos 154, mientras hay un sólo diacono permanente.
Fuente: Asia News.

Islámicos contra Daesh en Irak

Millones de islámicos chiitas acudieron a la ciudad santa iraquí de Kerbala, entre fuertes medidas de seguridad por temor a ataques por parte del grupo terrorista sunita Dáesh.
Para conmemorar el Arbaín, el final de los 40 días de luto por la muerte del imán Hussein, peregrinos de todo el país caminaron hacia la ciudad santa, que alberga el mausoleo de este nieto del profeta Mahoma, asesinado en el año 680 por las tropas del califa omeya Yazid durante la batalla de Kerbala.
Hasta el momento esta peregrinación, uno de los mayores acontecimientos religiosos del mundo, transcurrió en paz, a diferencia de los últimos años en los que se vio enlutada por atentados de la organización radical sunita Dáesh.
Más al norte, las fuerzas iraquíes intentan arrebatar Mosul al Dáesh, las autoridades movilizaron a 24,000 miembros del ejército y la policía para garantizar la seguridad de Kerbala, ubicada a unos 80 kilómetros al sur de Bagdad.
Numerosos fieles, que vestían de negro, caminaron durante días para llegar a esta ciudad del centro de Irak. Algunos venían de lugares tan alejados como Basora, situada a unos 500 kilómetros al sureste de Kerbala.
“Emprendimos nuestra marcha hace 13 días y llegamos a Kerbala el domingo por la noche”, cuenta Jaber Kadhem Jalif, al que acompañan su mujer y sus tres hijos.
Um Ali hizo el viaje sin su marido, miembro de las fuerzas que luchan por retomar Mosul, el último gran feudo de los yihadistas en Irak. “Rogamos a Dios que nos apoye contra Dáesh (acrónimo en árabe del ISIS), que nos ayude a liberar Mosul”, dijo la mujer de 40 años.
Según Nusayef al Jatabi, que dirige el consejo provincial de Kerbala, “entre 17 y 20 millones” de fieles habrán participado en la peregrinación, incluidos tres millones de extranjeros, en su mayoría iraníes.
Arabia Saudita e Irán no mantienen relaciones diplomáticas y se enfrentan sobre cuestiones regionales, especialmente los conflictos en Siria y Yemen.
Este año, por primera vez desde hace tres décadas, ningún peregrino iraní hizo el حَجّ [ḥaǧǧ] o حِجّة [ḥiǧǧa], la peregrinación anual a La Meca, en Arabia Saudita.
Fuente: Diario Panorama.

Puntuación: 5 / Votos: 35

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *