Un enfoque socoeconómico
La globalización y la aceleración de las innovaciones tecnológicas han desestabilizado las orientaciones y el pilotaje estratégico de las empresas y organizaciones. El incremento de las exigencias contradictorias de las partes interesadas (clientes, accionistas, personal, sindicatos, proveedores, instituciones de regulación y normalización) obliga a las empresas a innovar en todas las direcciones (producto, mercado, tecnología, organización y desarrollo humano) y a articular mejor sus sistemas de gobierno y gestión con el fin de asegurar la supervivencia y desarrollo de la empresa.
Por lo tanto, se diseñaron, implementaron y evaluaron unas estrategias socioeconómicas innovadoras en más de un millar de empresas y organizaciones públicas y privadas de todos los tamaños, en más de 70 sectores de actividad. Esas estrategias permiten lograr simultáneamente los objetivos económicos (comerciales e industriales) y sociales (cualificaciones, condiciones de vida profesional, retribuciones, empleos), mediante un proceso de estimulación de los dirigentes, mandos medios y personal.
Esas estrategias son eficaces, eficientes y se autofinancian a través de la recuperación de las numerosas pérdidas de energías y recursos (costos ocultos de los disfuncionamientos) que adolecen todas las empresas y organizaciones. Ese reciclaje de recursos incrementa la inversión intangible en el desarrollo del potencial humano que es factor determinante del desempeño económico sostenible, merced a su altísima rentabilidad.