¿Cuál es el problema con la Política Migratoria de Donald Trump al Separar Familias en la Frontera con México?

A view of inside U.S. Customs and Border Protection (CBP) detention facility shows children at Rio Grande Valley Centralized Processing Center in Rio Grande City, Texas, U.S., June 17, 2018. Picture taken on June 17, 2018. Courtesy CBP/Handout via REUTERS ATTENTION EDITORS – THIS IMAGE HAS BEEN SUPPLIED BY A THIRD PARTY. – RC174C9B4E40

Una injusta e inhumana aplicación de las leyes migratorias en los Estados Unidos ha desatado la indignación de un gran sector de la ciudadana estadounidense y mundial durante estas últimas dos semanas. Y no es para menos, ya que la Custom and Border Protection (CBP), agencia que es parte del Department of Homeland Security a cargo de Kirstjen Nielsen , decidió ejecutar una política migratoria antojadiza que separa las familias de aquellos inmigrantes ilegales o de personas que buscan asilo en los Estados Unidos.

Cabe señalar que muchas de estas personas que llegan desde diversos países de Centroamerica y Mexico, escapan de la violencia y amenazas contra su vida y la de sus familias en sus países de origen.

Donal Trump, el presidente de los Estados Unidos, ha declarado que esta política migratoria es producto de las lagunas legales en la legislación migratoria y que son únicamente los demócratas quienes cargan con la responsabilidad de este problema y que su administración esta solamente “aplicando la ley, porque la ley es la ley”.

Sin embargo, lo cierto es que ninguna ley federal señala que los las familias detenidas o que buscan asilo deban ser separadas y menos aun que los hijos menores de edad sean separados de sus padres mientras dure el proceso de deportación o asilo.

Lo mas indignante es que funcionarios de la administración de Trump salieron al frente a declarar su apoyo a esta política que ha sido considerada por muchos como “inhumana” y contraria a los valores de un país que es percibido como defensor de la libertad y los derechos como lo es los Estados Unidos de América.

Por ejemplo, Sarah Huckabee Sanders, Secretaria de Prensa de la Administración de Trump tuvo que recibir las criticas de un sector de la prensa americana que había hecho su investigación y descubierto que la política migratoria de separación de familias era un capricho y solo una manera de disuadir a los inmigrantes de no tocar mas las puertas de los Estados Unidos en busca de asilo, porque de hacerlo, les sucedería lo mismo que a estos inmigrantes y “asylum seekers” durante estas semanas, es decir, tomar a sus hijos y llevarlos a establecimientos alejados de ellos.

Cabe señalar que estos establecimientos eran totalmente inadecuados para albergar menores de edad ya que estos eran mantenidos bajo condiciones tan inadecuadas como estar rodeados por rejas como si fueran animales, o dormir cubiertos solo con “space blankets” sobre colchones tirados en el piso, y ni que decir de su exposición a diversos peligros que podrían atentar contra su integridad física, emocional y psicológica (trafico de personas, tocamientos indebidos, abuso sexual, violencia verbal, etc). Al respecto leer el siguiente informe: Neglect and Abuse of Unaccompanied Immigrant Children by U.S. Customs and Border Protection.

En medio de esta indignación generalizada, la hija de Donald Trump, Ivanka Trump, colgó una foto de ella con su hijo en Twitter, lo cual desato la furia de muchos ciudadanos quienes la criticaron por su indiferencia y falta de empatía en relación con los efectos de la aplicación de la política migratoria de su padre.

Otro funcionario que recibió las peores criticas ha sido el Fiscal General Jeff Sessions (un equivalente a Ministro de Justicia) quien justificó el trato inhumano recibido por las familias de inmigrantes y personas que buscan asilo con pasajes de la Biblia. La opinión publica comenzaba a indignarse aun mas por su parcializada lectura de la Biblia. Asimismo, su nefasta frase “La ley es la ley y nosotros solo la aplicamos” es el resumen de una irresponsabilidad por solucionar un problema tan grave de una manera mas creativa, eficiente y que respete los derechos de todos los involucrados en el problema.

Asimismo, tenemos la declaración de la Secretaria del Department of Homeland Security (DHS), Kirstjen Nielsen. La cabeza de este Departamento trató de justificar la separación de las familias alegando que no hay ningún problema en llevar a los niños a estos establecimientos que pueden compararse con “summer camps” o campamentos de verano temporales para ellos, o que “hay una vía legal abierta para todos los que quieran ingresar al país”. Esto último no convenció a muchos y las criticas no tardaron en llegar por parte de todo el mundo señalando que si dichas instalaciones eran como un “summer camp”, ella debería enviar a sus hijos a pasar un fin de semana bajo esas mismas condiciones.

Por último, en la cumbre de la indignación tenemos a un tipo que fue ex-asistente de Donald Trump llamado Corey Lewandowski, quien en una entrevista en Fox News utilizo una expresión de burla (“Womp, womp”) cuando se le indicaba sobre el caso de una niña inmigrante con síndrome de Down afectada por la política de inmigración de “cero tolerancia” de la administración Trump. Ese tipo de expresiones no se hacen, no hay justificación para ello. Eso es simplemente deprimente y bajo.

Mi posición sobre este problema:

1. En cuanto a las declaraciones de Jeff Sessions, considero que esta política de separar familias por el simple hecho de cruzar la frontera o para solicitar asilo es inhumana, sin justificación legal y solo demuestra una falta de creatividad del gobierno de Trump para solucionar el problema. Están metiendo en el mismo saco a inmigrantes ilegales y aquellos que buscan asilo en el país porque igual los separan de sus hijos mientras dure su procedimiento. Y para dejarnos estupefactos, el Fiscal General de los EE.UU.  ha señalado que la Biblia justifica este trato inhumano contra quienes quiebran las leyes migratorias de los EE.UU. Personalmente, creo que el Fiscal General esta tergiversando a su beneficio lo que sea que la biblia diga. Esto no es una cuestión de religión o enseñanzas de la biblia, sino una cuestión moral con claras guías de solución.

2. Mas allá de las posiciones políticas que enfrentan a republicanos y conservadores, existen reglas éticas básicas que al revisarlas nos indican claramente que es es erróneo utilizar niños como elemento punitivo para ejecutar una ley o política pública. Eso simplemente no se hace. Lo peor de todo es que las políticas americanas siempre tienen eco en otros países. Me preocupa mucho el impacto que este tipo de política conservadora y autoritaria basada en una lectura religiosa pudiera ser peligrosamente considerada el Perú en unos años. Recordemos quien lleva las de ganar en las próximas elecciones presidenciales en el Perú, pero peor aún, quienes apoyan su candidatura (grupos ultraconservadores y homofóbicos). Espero que nunca ocurra eso y que la religión no sea jamás la base o justificación para decidir los derechos de las personas.

3. Por otro lado, es incierto el futuro de muchos niños que han sido colocados en las mencionadas instalaciones donde, según el gobierno, son bien acogidos y alimentados. Sin embargo, eso no quita que continúen viviendo en condiciones infrahumanas encerrados en celdas, llorando y preguntando en todo momento por sus padres, ni que decir de su exposición a peligros contra su integridad física y emocional.

4. Entre muchos de esos migrantes existen personas que están solicitando asilo. ¿Por qué? Los motivos son diversos pero muchos de ellos provienen de Centro América. En algunos países de esa región existe violencia de todo tipo (doméstica, urbana, criminal, política). Muchos están escapando de situaciones que son peligrosas para su vida y la de sus familias, por ejemplo, violencia domestica, la violencia de la MS-13, pandillas, trabajo forzado, abusos sexuales, carteles de la droga que te hacen trabajar para ellos y dejar de lado tus planes, conscripción obligatoria a grupos paramilitares, pago de cupos para vivir tranquilo. Muchos padres no quieren seguir en esa situación y menos quieren ese futuro para sus hijos. En los EEUU muchos republicanos critican a estas personas de la siguiente manera: “Por que vienen acá! si saben que los van a separar de sus hijos! como los exponen! Oh por Dios!”. Lo que mas indigna es que lo hacen desde la comodidad de sus hogares, sin darse cuenta que son privilegiados, cuentan con seguro social, con ciudadanía, con un trabajo, con un sueldo y seguridad económica, sin mayores amenazas contra su vida. Ellos jamas han pasado por lo que estos migrantes están viviendo, y no se les pasa por la cabeza pensar que estas personas prefieren probar suerte de esta manera que seguir viviendo en sus lugares de origen bajo esas condiciones de amenaza contra sus vidas y la de sus familias. Es cierto que existe inmigración ilegal y esta debe ser sancionada. Sin embargo utilizar a niños como elemento punitivo es algo erróneo. Simplemente esta mal. Eso no se hace.

5. La declaración de Kirstjen Nielsen: “Hay una forma legal de ingresar al país” es indignante porque es una media verdad debido a que no señala cuán caro y lento es el proceso de residencia o asilo Si, medias verdades. No todos los inmigrantes y solicitantes de asilo tienen los mismos antecedentes.

No todos son miembros del MS-13, o inmigrantes ilegales que llegan a los EE.UU. con la intención de dañar a las personas en este país o recibir bienes y servicios de forma gratuita, es decir, vivir de la ayuda del gobierno. No. Hay personas que vienen a los Estados Unidos desde sus países por diferentes motivos, como salir de purgas, violencia de pandillas, actividades forzadas a pandillas, cárteles de drogas, trabajos forzados, participación en grupos paramilitares, violación sexual, narcotráfico, pago de cuotas a delincuentes a cambio de vivir en paz. Algunos de ellos solo buscan seguridad pero a cambio están recibiendo un tratamiento inhumano.

6. Es necesario un análisis con mayor detalle con relación a los principales agentes de este problema: Los niños. Una serie de matices existen entre ellos y es necesario tomarlos en cuenta para que aquellos que apoyan la política migratoria de separación de familias puedan entender los difícil que es separar a una madre de su hijo, a saber, existen niños con problemas de salud, síndrome de down, habilidades especiales, asperger, depresión, problemas de conducta, etc. Como dije lineas arriba, es un error garrafal utilizar niños como elemento punitivo con tal de hacer cumplir cualquier ley o política migratoria.

7.  Toda persona goza de derechos inherentes a su condición humana y estos derechos deben ser respetados. Los derechos humanos siempre estarán por encima de la ley o política publica de cualquier país y deben ser estrictamente respetados bajo responsabilidad y sanción de aquellos que se atrevan a vulnerarlos.

8. El hecho de que seas un contribuyente y votante registrado no te da el derecho a decirle a otros que hacer, que no hacer, o como pensar. Para muestra, pueden escuchar al tipo llamado “Tony” que interviene en este podcast en 23:31 – NPR: Your Feelings On Family Separations At The Border.

9. Siempre es bueno colocarse en los zapatos del otro. Pensar siempre en el concepto de “alteridad” para derribar prejuicios que solo llevan a situaciones tan nefastas como esta. Tomar en cuenta los detalles, los matices y los motivos de toda decisión que haga una persona nos podrá hacer ver mas allá de las ideas que fundamentan escollos del desarrollo humano como son la xenofobia, el racismo, y la injusticia.

Conclusiones:

  • La política de separación de familias en la frontera con México es a todas luces una táctica que utiliza el miedo y la incertidumbre como elemento disuasivo para aquellos que crucen la frontera ilegalmente o para aquellos que buscan asilo en los Estados Unidos. Es una política antojadiza de la administración de Donald Trump que envía la siguiente advertencia: “Si tocas nuestra puerta o ingresas ilegalmente, te sucederá lo mismo”.
  • La inmigración ilegal debe ser sancionada, pero utilizar a los niños y hasta bebes como elemento punitivo contra los padres es un error muy grande. El solo hecho de afectar negativamente la libertad, los derechos parentales y el interés superior del niño en pro de la ejecución de una política migratoria irregular es una decisión equivocada e inconstitucional.
  • La religión y la Biblia nunca deben ser utilizados para justificar un trato inhumano o injusto. Creas o no creas en ella, la separación de familias no es una cuestión de religión o lectura de pasajes de la biblia, sino de moralidad.
  • La ética parlamentaria debe de estar por encima de cualquier enfrentamiento político, especialmente en asuntos donde esta involucrada la protección del interés superior del niño.

arturodiazf

 

Análisis de Decisión: Corte Suprema de los EE.UU. dictamina (restrictivamente) en el caso del panadero que se negó a preparar un pastel de bodas para una pareja del mismo sexo [Actualizado]

Por: Amy Howe Independent Contractor and Reporter

Posted Mon, June 4th, 2018 4:07 pm

File – In this March 10, 2014 file photo, Masterpiece Cakeshop owner Jack Phillips decorates a cake inside his store, in Lakewood, Colo. Phillips, who refused to make a wedding cake for a gay couple, is to argue Tuesday, July 7, 2015 before the Colorado Court of Appeals that his religious beliefs should protect him from sanctions against his business. (AP Photo/Brennan Linsley, file)

La Corte Suprema de los Estados Unidos dictaminó hoy a favor de Jack Phillips, un panadero de Colorado que se negó a hacer un pastel personalizado para una pareja del mismo sexo porque creía que hacerlo violaría sus creencias religiosas. Esta fue una de las decisiones más esperadas durante este ultimo periodo de la Corte, aunque ha sido muy limitada en su alcance: A pesar de que la posición de Jack Phillips prevaleció hoy, la opinión del juez Anthony Kennedy se basó en gran medida en la conclusión de la mayoría de magistrados de la Corte Suprema de los Estados Unidos de que la agencia administrativa de Colorado que falló en contra de Phillips lo trató injustamente al ser demasiado hostil frente a sus mas sinceras creencias religiosas. La opinión parecía dejar abierta la posibilidad de que, en un futuro caso, las sinceras creencias religiosas de un proveedor de servicios tuvieran que ceder ante el interés del estado en proteger los derechos de las parejas del mismo sexo, y la mayoría no descartó en absoluto uno de los argumentos centrales en el caso: si obligar a Phillips a preparar un pastel para una pareja del mismo sexo violaría su derecho a la libertad de expresión.

La disputa que condujo a la decisión de hoy comenzó en el año 2012, cuando Charlie Craig y David Mullins fueron a Masterpiece Cakeshop, una panadería en las afueras de Denver, para ordenar un pastel que seria utilizado para la celebración de su próxima boda. Sin embargo Jack Phillips, el dueño de la panadería y un devoto cristiano, rechazó la solicitud de la pareja ya que no estaba dispuesto a diseñar pasteles personalizados que entren en conflicto con sus creencias religiosas. La agencia de derechos civiles de Colorado determinó que Phillips había violado las leyes antidiscriminatorias del estado indicándole que si quería hacer pasteles para bodas de distinto sexo, tendría que hacer lo mismo para las bodas entre personas del mismo sexo. Luego de que un tribunal de Colorado confirmara ese fallo, Phillips acudió a la Corte Suprema de EE. UU. el año pasado.

Luego de casi seis meses de argumentos orales, los jueces entregaron hoy a Phillips una victoria, aunque no necesariamente la decisión que él y sus seguidores esperaban. El magistrado Kennedy, autor de algunos de los fallos sobre los derechos de los homosexuales más importantes de la corte suprema, comenzó explicando que el caso involucraba un conflicto entre dos principios importantes. Por un lado, la sociedad ha reconocido que “las personas homosexuales y las parejas homosexuales no pueden ser tratadas como parias sociales o como inferiores en dignidad y valor”, y sus derechos están protegidos por la Constitución. Por otro lado, “las objeciones religiosas y filosóficas al matrimonio homosexual son puntos de vista protegidos y en algunos casos formas de expresión protegidas”. Pero incluso si esas objeciones están protegidas, explicó Kennedy, los precedentes del Tribunal Supremo dejan claro que, en algunos casos, el derecho al libre ejercicio de la religión no es absoluto y puede estar limitado por leyes neutrales que se aplican a todos. Está claro, continuó Kennedy, que en algunos escenarios, las sinceras creencias religiosas pueden prevalecer sobre tales leyes; por ejemplo, un miembro del clero que objete el matrimonio entre personas del mismo sexo no puede ser obligado a realizar tales matrimonios. Pero al mismo tiempo, explicó Kennedy, no se puede permitir que la excepción se trague la regla, con el resultado de que “una larga lista” de personas podría negarse a proporcionar servicios para matrimonios del mismo sexo.

En este caso, sugirió Kennedy, Phillips se encontró en medio de un dilema: como consideraba que su oficio era uno en el que utilizaba “sus habilidades artísticas para hacer una declaración expresiva”, hacer un pastel para una pareja del mismo sexo requeriría él para transmitir un mensaje que es inconsistente con sus creencias religiosas. Este dilema se complicó aún más, señaló Kennedy, por el “trasfondo de los principios legales y la administración de la ley en Colorado en ese momento”: Colorado no reconocía los matrimonios entre personas del mismo sexo, y la ley estatal también le dio a Phillips “cierta libertad para declinar crear mensajes específicos que el tendero consideraba ofensivos “.

Pero la cuestión crítica de cuándo y cómo se puede limitar el derecho de Phillips a ejercer su religión tenía que determinarse, enfatizó Kennedy, en un procedimiento que no esté contaminado por la hostilidad hacia la religión. Aquí, observó Kennedy, la “consideración neutral y respetuosa a la que Phillips tenía derecho se vio comprometida” por los comentarios de los miembros de la Comisión de Derechos Civiles de Colorado. En una audiencia, subrayó Kennedy, los comisionados “respaldaron repetidamente la opinión de que las creencias religiosas no pueden ser legítimamente llevadas a la esfera pública o comercial, lo que implica que las creencias y personas religiosas no son bienvenidas en la comunidad empresarial de Colorado”. Y en una reunión posterior , Señaló Kennedy, un comisionado “llegó incluso a comparar la invocación de Phillips de sus creencias religiosas sinceras con las defensas de la esclavitud y el Holocausto”. “Este sentimiento”, amonestó Kennedy, “no es apropiado para una Comisión encargada de la solemne responsabilidad de aplicar la ley antidiscriminación de Colorado de una manera justa y neutral, una ley que protege contra la discriminación basada en motivos religiosos y de orientación sexual “. Además, Kennedy agregó, el tratamiento de La Comisión respecto de las objeciones religiosas de Phillips estaba en desacuerdo con sus fallos en los casos de los panaderos que se negaron a crear pasteles “con imágenes que transmiten la desaprobación de los matrimonios del mismo sexo”.

Aquí, Kennedy escribió, Phillips “tenía derecho a un decisor neutral que le diera una consideración plena y justa a su objeción religiosa, lo cual trató de afirmar en todas las circunstancias en que este caso fue presentado, considerado y decidido”. Dado que Phillips no tuvo tal procedimiento, el tribunal concluyó que la orden de La Comisión  – que, entre otras cosas, requería que Phillips vendiera tortas de boda a parejas del mismo sexo o cualquier otra cosa que él vendería a parejas de distinto sexo y entrenamiento correctivo obligatorio e informes de cumplimiento – “debia ser anulada”.

Pero la mayoría dejó abierta la posibilidad de que un caso futuro podría surgir de manera diferente, particularmente si el que toma las decisiones en el caso considera las objeciones religiosas de manera neutral y justa. Otros casos, enfatizó la mayoría, “deben esperar una mayor elaboración en los tribunales, todo en el contexto de reconocer que estas disputas deben resolverse con tolerancia, sin una falta de respeto indebida a las creencias religiosas sinceras, y sin someter a los homosexuales a indignidades cuando buscan bienes y servicios en un mercado abierto “. La jueza Ruth Bader Ginsburg disintió de la decisión del tribunal, en una opinión unida solamente por la jueza Sonia Sotomayor. Ginsburg enfatizó que “hay mucho en la opinión de la Corte con la que estoy de acuerdo”, pero ella “fuertemente” no estaba de acuerdo con la idea de que la pareja del mismo sexo “debería perder este caso”. En particular, argumentó, ni las declaraciones de los comisionados sobre la religión, ni el trato dispar de La Comisión a otros panaderos que se negaron a hacer tortas que desaprobaran el matrimonio entre personas del mismo sexo justifican un fallo a favor de Phillips.

La juez Elena Kagan se unió a la opinión de Kennedy para el tribunal, pero también presentó una opinión concurrente, a la que se unió el juez Stephen Breyer. Kagan estuvo de acuerdo con la opinión de Kennedy de que La Comisión de Derechos Civiles de Colorado no le había dado a Phillips y sus objeciones religiosas el tipo de “consideración neutral y respetuosa” a la que tenía derecho. Pero ella no daría ningún peso al tratamiento de La Comisión hacia los panaderos que se negaron a hacer tortas con mensajes que denigraban el matrimonio entre personas del mismo sexo, porque en su opinión estos últimos no habían violado la ley de Colorado en el corazón del caso de Phillips.

En una opinión concurrente unida por el juez Samuel Alito, el juez Neil Gorsuch rechazó tanto las opiniones de Ginsburg como las de Kagan. En su opinión, los diferentes casos de los panaderos -negarse a hacer tortas para un matrimonio del mismo sexo y negarse a hacer tortas que menospreciaran el matrimonio entre personas del mismo sexo- eran, desde una perspectiva legal, similares, y La Comisión se equivocó al tratarlos de manera diferente solo porque consideraba las creencias de Phillips como “ofensivas”. Usando un lenguaje fuerte, Gorsuch enfatizó que, en los Estados Unidos, “el lugar de los funcionarios seculares no es el de juzgar las creencias religiosas, sino solo proteger su libre ejercicio”. Del mismo modo que ‘nos jactamos orgullosamente de nuestra jurisprudencia sobre la libertad de expresión’ que protegemos el discurso que odiamos, debe presumirse con orgullo de nuestra jurisprudencia sobre el libre ejercicio que protejamos las creencias religiosas que consideramos ofensivas “.

El juez Clarence Thomas escribió por separado, en una opinión unida por Gorsuch, para abordar un problema que el tribunal no decidió: si una decision que ordena a Phillips hornear pasteles para bodas entre personas del mismo sexo viola su derecho a la libertad de expresión. En opinión de Thomas, la creación de pasteles de boda personalizados de Phillips es exactamente el tipo de conducta “expresiva” protegida por la Primera Enmienda. Requerir a Phillips que haga tales pasteles para el matrimonio entre personas del mismo sexo, incluso cuando transmita un mensaje que “cree que su fe lo prohíbe”, viola sus derechos de la Primera Enmienda.

“Debido a que la decisión del tribunal vindica el derecho de Phillips al libre ejercicio de su religión”, concluyó Thomas, “parece que la libertad religiosa ha vivido para luchar otro día”. La decisión de hoy, sin embargo, arroja al menos alguna duda sobre lo fácil que será para otros en la posición de Phillips para seguir adelante, dado el énfasis de la mayoría en el estado inestable de las leyes de matrimonio del mismo sexo cuando Craig y Mullins llegaron a Phillips en 2012 y la abierta hostilidad mostrada por La Comisión de Derechos Civiles de Colorado en las audiencias de Phillips . La discusión de Thomas sobre el reclamo de libertad de expresión de Phillips pareció reconocer esto, con la observación de que, “en casos futuros, la libertad de expresión podría ser esencial para prevenir” la decisión del Tribunal Supremo de 2015 en Obergefell v. Hodges, reconociendo un derecho constitucional al matrimonio entre personas del mismo sexo, de ser utilizado para “retratar a todos los que no lo hacen” está de acuerdo con esa decisión “como fanáticos y sin título para expresar una opinión diferente”. En resumen, el fallo de hoy parecía dejar abiertas al menos tantas preguntas como resolvió . De lo único que podemos estar seguros es de que estos problemas volverán a los tribunales, y con toda probabilidad al Tribunal Supremo, dentro de poco.

Traducido al español de: Amy Howe, Opinion analysis: Court rules (narrowly) for baker in same-sex-wedding-cake case [Updated], SCOTUSblog (Jun. 4, 2018, 4:07 PM), http://www.scotusblog.com/2018/06/opinion-analysis-court-rules-narrowly-for-baker-in-same-sex-wedding-cake-case/ 

Ver: https://www.cnn.com/2018/06/04/politics/masterpiece-colorado-gay-marriage-cake-supreme-court/index.html

Video 03 Diciembre 2017:

 

Supreme Court Decision Delivers Blow To Workers’ Rights

By: Nina Totenberg

In a case involving the rights of tens of millions of private-sector employees, the U.S. Supreme Court, by a 5-4 vote margin, delivered a major blow to workers, ruling for the first time that workers may not band together to challenge violations of federal labor laws.

Writing for the majority, Justice Neil Gorsuch said that the 1925 Federal Arbitration Act trumps the National Labor Relations Act and that employees who sign employment agreements to arbitrate claims must do so on an individual basis — and may not band together to enforce claims of wage and hour violations.

“The policy may be debatable but the law is clear: Congress has instructed that arbitration agreements like those before us must be enforced as written,” Gorsuch writes. “While Congress is of course always free to amend this judgment, we see nothing suggesting it did so in the NLRA—much less that it manifested a clear intention to displace the Arbitration Act. Because we can easily read Congress’s statutes to work in harmony, that is where our duty lies.”

Justice Ruth Bader Ginsburg, writing for the four dissenters, said that the 1925 arbitration law came well before federal labor laws and should not cover these arm-twisted, “take-it-or-leave it” provisions that employers are no insisting on.

The inevitable result, she warned, is that there will be huge underenforcement of federal and state statutes designed to advance the well being of workers.

She urged Congress to correct the court’s elevation of the arbitration act over workers’ rights.

Notably, Ginsburg’s dissent is five pages longer than the majority’s opinion. And Gorsuch spends time in his opinion to respond point by point to the minority’s arguments.

The ruling came in three cases — potentially involving tens of thousands of non-union employees — brought against Ernst & Young LLP, Epic Systems Corporation and Murphy Oil USA, Inc.

Each required its individual employees, as a condition of employment, to waive their rights to join a class-action suit. In all three cases, employees tried to sue together, maintaining that the amounts they could obtain in individual lawsuits were dwarfed by the legal fees they would have to pay as individuals to bring their cases under the private arbitration procedures required by the company.

The employees contended that their right to collective action is guaranteed by the National Labor Relations Act. The employers countered that they are entitled to ban collective legal action under the Federal Arbitration Act, which was enacted in 1925 to reverse the judicial hostility to arbitration at the time.

A study by the left-leaning Economic Policy Institute shows that 56 percent of nonunion private-sector employees are currently subject to mandatory individual arbitration procedures under the 1925 Federal Arbitration Act, which allows employers to bar collective legal actions by employees.

The court’s decision means that tens of millions of private non-union employees will be barred from suing collectively over the terms of their employment.

In: NPR

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