Por Jorge Antonio Silva Mora

Alumno de la Maestría en Psicología Comunitaria

Luego de la discusión en el curso Modelos de Intervención en Psicología Comunitaria, me queda claro que el trabajo comunitario es un trabajo político y hay que asumirlo de esa manera. No creo estar errado en ver que si hay justamente algo que se necesita en nuestro país con suma urgencia somos los agentes del cambio social. De una nueva manera, no ideologizados, no con teorías sociales ni modelos que hasta ahora no veo que hayan dado buenos resultados, salvo tal vez en pequeña escala.

En este momento tenemos más de 200 conflictos sociales ocasionados mayormente por costumbres abusivas empresariales heredadas de patrones y gamonales y además favorecido por un estado ausente o con poca o nula voluntad de trabajar por y para la ciudadanía. Los planteamientos de soluciones han estado liderados mayormente por ideologías basadas en constructos dogmáticos de modelos foráneos más que en una apertura para aprender y tratar de integrar los intereses particulares de cada grupo con el otro y buscar un crecimiento pensando en el bienestar común.

Estoy pensando en principio en tres ejes básicos para fomentar y/o promocionar políticas educativas en:

– El desarrollo comunal, no como un agente sólo interviniente que al desaparecer no deja nada, sino como un agente que considera como lo más valioso lo que ya existe en la comunidad aprendiendo de ella, reforzando las alianzas positivas, fomentando la solidaridad y ayudando a descubrir nuevos o diferentes mecanismos de progreso social y económico.

– Una formación ciudadana de la persona para que entienda cuáles son sus derechos y deberes en la sociedad y los ejerza con propiedad.

– La construcción de una identidad que nos ayude a valorarnos y sentirnos unidos en causas comunes. Creo que a la falta de esto esto se debe en gran medida el problema de no poder trabajar en equipo con propiedad. Esto lo podemos observar claramente en los deportes por ejemplo donde vemos que en aquellos en los que el desempeño es individual nos manejamos muy bien pero en los que necesitamos trabajar en equipo nuestro desempeño es muy pobre.

Y aunadas a estas, tres cosas que me parecen fundamentales mencionadas por M. Montero (en otro escrito) a tener siempre en cuenta con respecto al desarrollo comunal aunque pienso que en realidad se pueden aplicar a cualquier forma de tratamiento en salud psicológica: toma de conciencia, autodeterminación y autogestión.