Tambo 1500: ¿Cuál fue el Pueblo de Tambo en el siglo XVI?

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Tambo 1500: ¿Cuál fue el pueblo de Tambo en el siglo XVI? Por Julio Valdivia & Rodrigo Llosa   

Julio Valdivia Ochoa, abogado investigador especialista en historia de Tambo e Ilo. Rodrigo Llosa Sanz, ingeniero investigador especialista en historia de Chule y Mejía. 

Rodrigo: En el afán de encontrar el puerto perdido de Chule es relevante hacernos la pregunta del título. Con ello podríamos saber a qué se referían antiguos españoles cuando afirmaban que entre el puerto y el valle había 2 leguas.  

Julio: En documentos de colonia tardía notamos que se habla de un Pueblo de Tambo. Sin embargo, en épocas prehispánicas este valle no tuvo una sola comunidad homogénea. Lo mismo que en Moquegua, había parcialidades, varios asentamientos liderados por diferentes señores o caciques vinculados a comunidades mayores de origen altiplánico aymara y otros emparentados con los chiribaya de Ilo. Todos conectados a rutas comerciales ancestrales de pesca, guano de islas y producción agrícola como el ají que el poderío lacustre adquiría de lugares como Tambo, similar a la actualidad. 

Rodrigo: En 1912 Rómulo Cuneo Vidal afirmó que el puerto de Chule estuvo entre Mollendo y Mejía, lo publicó en La Bolsa, diario de su tiempo. En 1939 el sacerdote historiador Víctor Barriga sugirió que estaba más cerca de Mejía; ya lo sospechaba el escocés Douglass quien estudió los alrededores en 1928. La distancia de 2 leguas entre el río Tambo y el puerto la anotó Pedro Cieza de León alrededor de 1550. Doce años después el clérigo Alonso de Paz declaró que –a esa misma distancia– el encomendero y capitán Alonso de Cáceres tenía a su cargo nativos camanchacas en Tambo donde cultivaban maíz. Una legua castellana es lo que avanza alguien caminando 1 hora o en caballo la mitad de tiempo. La equivalencia es 5,5 km, distinta a la legua marina o aquella que demarcaba propiedad. Guillermo Galdos Rodríguez hizo un pequeño estudio sobre los puertos de Arequipa en 1991 replicando la opinión de Cuneo Vidal. Mejor análisis hizo en el año 2000 el geólogo historiador de Tambo Mario Arenas Figueroa poniendo de nuevo en duda a Mollendo como puerto en el siglo XVI. 

Julio: El Ing. Mario Arenas estudió también el Pueblo de Tambo que lo identifica como el actual Cocachacra. Escribió que su parroquia comenzó en 1740. En 1782 el religioso Tadeo de la Llosa demarcó la plaza. En la actualidad mi persona realiza un trabajo de investigación por el que podemos añadir que Cocachacra fue hacienda de Antonia de Peralta, heredad que se fue tornando en pueblo en el siglo XVIII. Lo curioso es que calculo que en el 1500 fue un asentamiento antes que hacienda. Durante la intendencia los pueblos más importantes de Tambo estaban entre el “pueblo de las chacras de coca” y Valle Arriba. Tiene una razón: el camino de Tambo hacia Arequipa fue por la quebrada de Linga. Pienso que Almagro en su retorno de Chile cruzó el hondable y furioso río -así lo nombran- a la altura de El Toro, cerca a la zona que hoy conecta con Moquegua a través de la carretera del Fiscal que lleva el nombre no por el cargo de una persona, sino por un camino fiscal entre el valle y dicho cruce.

Rodrigo: Caminar hoy entre el río y Mejía (10 km) demora 2 horas (2 leguas) y entre Mejía y Mollendo demora 3 (14km). Esto fue obviado por el periodista historiador Bernardino Rodríguez quien al igual que Antonio Raimondi en 1863, se empecinó en que este puerto estuvo en Mollendo.  Raimondi pensaba que La Ensenada era parte del Valle de Tambo. Visiblemente un valle comienza donde hay vegetación o cultivos y es cierto, en su siglo había un canal que irrigaba el Boquerón y parte de La Ensenada. Sin embargo, el geógrafo Mariano Paz Soldán –su amigo– no pensaba lo mismo, una década antes de inaugurar el ferrocarril de 1871 entre Arequipa y el mar, concordó con el ingeniero Blume que en Mejía se podía formar una población de primer orden, construir un muelle y estación principal. Apuntó: «el valle de Tambo 2 ó 3 leguas distante proveerá lo necesario». 

Julio: No parece que en lo que después llamaríamos Punta de la hacienda de Bombón hayan estado los maizales de Cáceres. Cruzar el río en crecida era tema complejo para llegar al puerto, los puentes aparecen en Tambo recién siglos después. Por eso descarto también a Chucarapi, cañaveral de los Peralta, íntimos de la familia Cáceres. 

Rodrigo: Puede que en el siglo en que España conoció la costa de Arequipa algunos asentamientos hayan estado en Guardiola (hoy La Curva) o en el Frisco (cerca al Arenal). Estas laderas desérticas contienen restos arqueológicos no solo de enterramientos, presumiblemente también de viviendas de caña y esteras como imagino fue en parte Chule (imagen: Ranchos en Alto Boquerón año 2025, como pudieron ser los asentamientos de Tambo o Chule en el siglo XVI, libro Mexia).

Julio: Pocos pobladores con pueblos dispersos y mucho espacio. Cáceres tenía considerable cantidad de topos de tierra. Lógico pensar que sus trabajadores prefirieran estar más cerca del río cuidándose de las crecidas, pero por plagas y fiebres -lo que denominaban tercianas- probablemente dormían en laderas. 

Rodrigo: Pienso posible que haya habido maíz en El Boquerón. En 1700 jesuitas de Arequipa fueron a ver unas tierras suyas en Quialaque, quebrada que hoy colinda con Mejía. El expediente especifica que se consideraba parte del Valle de Tambo, a legua y media del río, y a más de 6 de su olivar en Matarani. Los jesuitas sabían que a 8 años del Huaynaputina se habían vendido esas chacras. Hacen mención a un canal que probablemente se tapó aunque permaneciera El Algarrobal. Los jesuitas no pudieron irrigar esa zona, no era rentable rescatarla. Recién se pudo cultivar de nuevo siglos después en la década de 1950 con el proyecto de irrigación. El expediente jesuita de Quialaque menciona que la pesquería de Chule estaba a 1 legua donde hoy es Mejía. 

Julio: Nos preguntamos por qué tuvo poca población relativa y cambiante el Valle de Tambo y su vecino Chule. En la década de 1540 había 36 hombres que pagaban tributos al encomendero inicial Alonso Ruíz. En 1552, 8 mitmas y 6 hatunrunas o indios naturales del lugar. Alrededor de 1570 eran 25 tributarios, con una población total de 120 personas encomendadas a Diego de Cáceres. Además, en Tambo tenían tierras los indios de Characato del encomendero Pedro Godínez. Es posible que este valle multiétnico y con contabilidades separadas tuviera más mitmas que retornaron a sus comunidades originarias en serranías y punas tras el desbarato español y la caída del incanato. 

Rodrigo: Posible también que los españoles emplearan a comunidades más desarticuladas de la costa sur para trabajos en el transporte de arrieraje vinculable a los puertos. No todo queda escrito en documentos oficiales. 

Julio: Al fin de sus días, Alonso de Cáceres indica que los camanchacas evitaran cargar el maíz al puerto de Chule, que usaran una carreta.

Rodrigo: En 1860 el puerto de Islay recibió 800 cajas de máquinas importadas para la textilera de Lucre en Cusco, colocaron en tandem mulas y usaron la ruta de Cachendo que dio luces para el ferrocarril de 1871. Yendo hacia atrás, me cuestiono si en el 1500 el mar impedía caminar entre el peñón de Sombrero Grande y el vistoso barranco. Cruzar las quebradas intermedias entre Tambo y Mollendo aumentaría la percepción de leguas y no podrían haber usado esa carreta. 

Julio: Lástima que no tengamos tantos detalles como quisiéramos y no exista una referencia documentaria clara sobre un solo pueblo de Tambo para el siglo XVI. Pero si lo pensamos, es lo que ocurre hoy, son varias poblaciones con personalidades propias que sumamos 30mil almas.

Rodrigo: Por argumentos como la densidad de nombres hispanos en las lomas de Mejía, las 2 leguas de distancia respecto a Tambo, la modificación local del litoral, mediciones topográficas, el expediente jesuita de Quialaque y otros varios detalles de archivo, es que yo también pienso que Chule estuvo en el distrito de Mejía no necesariamente en la actual quebrada homónima. La reconstrucción mental de un puerto desaparecido.

Julio: Muchos pagaríamos por viajes al pasado, ver cómo era Tambo antes de la erupción del Huaynaputina. Siento que mi conversación íntima con esos siglos es a través de la paleografía. Ojalá tuviésemos más contribuciones de la arqueología antes de que las poblaciones actuales se expandan.

Descargar aquí el artículo en el diario EP, Lunes 26 Mayo 2025, pág.6-7 (PDF 1MB)

Nota 1. Chule en Mejía: Cómo sabemos dónde estuvo el puerto de Chule, qué estudiosos opinaron por Mejía, qué distancias hubo. 

Nota 2. Julio Valdivia Ochoa es el único paleógrafo en el Valle de Tambo, desciende de Dámaso Valdivia, quien el coronel Trinidad Pacheco Andía menciona como anterior propietario de todo Mejía, y aunque lo hayamos puesto en debate en el libro Joyas de Mejía, el apellido se distingue en la provincia. Incluso un distrito lo lleva por el influyente Deán nacido en el Pueblo de Tambo.

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