No era Cismo. Huancayo – tarde en los 90s. Algunos comerciantes corrían tras sus pertenencias arrastradas por un viento fuerte repentino. Mi acompañante dijo –“parece que va a llover”, ¿vamos de todos modos o regresamos a casa?, nuestras mochilas estaban cargadas con libros para vender que podían estropearse con la lluvia pues no los protegía plástico alguno. No terminé de decirle que regresábamos a casa cuando algo me arrebató el bastón y los lentes, ella se soltó de mí y empezó a correr. Yo me sentí perdida, y busqué anciosa la pared. Algo alargado me golpeó la cabeza, varios objetos pequeños me tropezaron la cara, y algo abultado golpeó mi pierna izquierda. Seguro eran cosas arrastradas por el viento. Mi acompañante regresó y me devolvió el bastón en la mano, yo estaba además de adolorida consternada, ¡agarre fuerte su bastón y yo le guardo los lentes! –me dijo, mientras éramos literalmente empujadas por el viento. Recuerdo que quise hablar pero mi boca se llenó toda de tierra y empezó a llover, chorros primero y luego ¡granizo! Para mí era granizada por primera vez, ya no regresaríamos caminando a casa, mis zapatos no eran los adecuados y la calle estaba hecha una laguna. Entramos en una tienda que estaba cerrando, afortunadamente el encargado, al verme con mi bastón, fue solidario y nos dejó quedarnos hasta poder abordar un taxi. Y esto…¡No era una emergencia!
La nota. “…se ha identificado que serán cinco las regiones más afectadas por la presencia del Fenómeno El Niño: Tumbes, Piura, Cajamarca, Lambayeque y La Libertad, es necesario contribuir a reducir los impactos negativos y proteger la integridad física y emocional de los colectivos con mayor vulnerabilidad. La ENEDIS 2012, estima que en las 5 regiones priorizadas, existen 160,000 personas con discapacidad física; 130, 000 con discapacidad visual y 87,000 con discapacidad auditiva…” Se lee en la nota “gestión del riesgo y personas con discapacidad”, publicada por el CONADIS. Sin embargo, las cifras están incompletas. Sorprendentemente, no han sido tomadas en cuenta en esta estimación las personas con discapacidad intelectual ni psicosocial. Además los distritos de Lima Metropolitana, Lima Provincias, Ancash y otras regiones actualmente en emergencia no aparecen.
