Revlon

A inicios de agosto de 2020, Revlon envió $ 7M a Citibank para que remita ese dinero a sus acreedores. El dinero se imputaría a los intereses por un syndicated term loan de 2016. Citi, sin embargo, cometió un pequeño desliz: no transfirió $ 7M, sino $ 893M. El total de la deuda, que vencía recién en 2023.

La reacción de los acreedores de Revlon fue, naturalmente, de sorpresa. El mundo es un lugar raro, pero es sabido que nadie paga completamente una deuda hoy cuando puede pagarla en 3 años sin que la suma cambie. “Revlon tendrá sus razones”, pensaron.

Al día siguiente, Citi informó del error a los acreedores y pidió amablemente que retornen el dinero. Los resultados fueron mixtos: de los $ 893M, $ 500M no fueron devueltos. Dado que las buenas maneras no funcionaban, Citi recurrió a las malas. El 17 de agosto de 2020 presentó una demanda e incluso obtuvo algunas temporary restraining orders para congelar el dinero transferido.

En Estados Unidos, la regla general es que si recibes dinero por error tienes el deber de devolverlo. Si por ejemplo un banco te transfiere $ 120k y te los gastas, enfrentas hasta responsabilidad penal (ver caso de Robert y Tiffany Williams de 2019). Sin embargo, hay una excepción: la “discharge-for-value defense”. En esencia, si el receptor tiene en efecto un crédito contra el que transfirió el dinero y no tenía conocimiento del error (actual notice) o no podía inferir que hubo error (constructive notice) al momento de la transferencia, puede quedarse con el dinero.

El mes pasado, y en primera instancia, el juez determinó que hubo error humano en la transferencia. Sin embargo, concluyó que los acreedores no podían inferir la existencia de tal error. Al contrario, pensar que hubo un error hubiese sido cosa de locos. Creer que “Citibank, one of the most sophisticated financial institutions in the world, had made a mistake that had never happened before, to the tune of nearly $1 billion — would have been borderline irrational.” Los acreedores ganaron (al menos por ahora).

¿Lo mejor del caso? En la sentencia el juez cita algunas conversaciones de los acreedores de Revlon después de que Citi les dijese que la transferencia fue por error. Básicamente, los acreedores están reventando de risa. Aquí una perla:

“How was work today honey? It was ok, except I accidentally sent $900mm out to people who weren’t supposed to have it”
(https://www.nysd.uscourts.gov/sites/default/files/2021-02/20cv6539%20Citibank%20Opinion.pdf)
(https://www.reuters.com/article/us-citigroup-revlon-lawsuit-idUSKBN2AG1TJ)

Postdata: ¿Cuál sería la respuesta en Perú? Una posición razonable sería considerar de entrada que Citi no pagó a favor de Revlon, sino en nombre de ella. Citi actuó en representación de Revlon, y por tanto se descarta cualquier figura de pago de tercero. Sobre esa base, aplicaría el artículo 180 del Código Civil y entonces los acreedores no estarían obligados a devolver el dinero.
Para Citi, la situación sería difícil. Si no hay pago de tercero, menos hay subrogación, y por lo tanto las garantías que tuvieron los acreedores de Revlon desaparecen. Citi tendría que recurrir al enriquecimiento sin causa.

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