Una nación se consolida si los pueblos logran construir un estado de verdad. Las funciones del estado son orientar el desarrollo de dichos pueblos. Son tres campos de acción: lo material (infraestructura, …), la energía (salud, …) y los signifcados (educación, …). Los funcionarios del Estados son de dos tipos, aquellos que son elegidos por el pueblo y los que son designados por los electos. Estos funcionarios son los responsables de brindar la orientación para que se desarrollen los tres campos armoniosamente, a cambio los pueblos pagan impuestos y les dan un presupuesto a los funcionarios.
Entonces, es lícito hablar que un Estado moderno, debe contar con funcionarios del estado (Estado-Gobierno), con organizaciones de las comunidades estructuradas (Estado-Pueblo), ente ambos se establece un contrato por el cual los primeros administran el presupuesto. este proceso tiene ser fiscalizado, por lo que se requiere un sistema de control, conformado por personas que gozan de la confianza de los funcionarios del Gobierno y de las Organizaciones de las Comunidades (Contraloría, SUNAT, y otros)
El país, no se consolidará como nación, si no logra un Estado moderno. Los funcionarios deben estar sometidos a una fiscalización real, y ellos no son los únicos que deben designar a las personas encargadas del Control, esta es una desición compartida mitad mitad con las organizaciones de las comunidades (urbanas y rurales) y las organizaciones civiles.
¿Quiénes son los funcionarios del Estado? Quienes dan un servicio por el cual reciben una remuneración proveniente de la recaudación de los impuestos. Si estos funcionarios, por ejemplo son ineficientes, hacen huelgas y mal usan los recursos de los constribuyente, tenemos la figura del estado contra el mismo estado. Lo curioso, es que muchos de estos funcionarios, argumentan que las huelgas son del pueblo contra el gobierno, como es el caso de los profesores y otros, pero no se dan cuenta que son ellos los llamados a dar un buen servicio.
En el país, urge un esclarecimiento de los conceptos de estado y nación. Es un indicador de decadencia, estancamiento y corrupción el desorden conceptual. El Estado-pueblo, es decir los pobladores y sus organizaciones civiles, deben estar en capacidad de romper el contrato de servicio que les brinda el Estado Gobierno si éste no se ajusta a los acuerdos por los cuales fueron elegidos, lo que es válido para educación, salud y otros. Un mejor servicio, solo será posible si el Estado-gobierno, está integrado por funcionarios de los más altos méritos: Hablamos de un Gobierno de la meritocracia, los mejores de cada campo, seleccionados por elección directa o designación, quienes asegurarán una calidad en los servicios. Entre ambos, los órganos de control, deberán gozar de la confianza de cada lado (Estado-gobierno y del Estado-pueblo), y serán quienes señalen que aspectos del contrato se está incumpliendo, para que se tomen las medidas correctivas oportunamente.
Nota: Son comentarios del libro “Democracia Real del Siglo XXI y la Segunda Independencia del Perú”, Juan Rosas Dávila, 2009.