Querido Escritor:
Me dijiste, muy sutilmente, antes de mi viaje a Cusco, que la belleza de las mujeres que coloqué como figuras en tu cuento, deslumbraban tu atención, incluso para ti mismo, que habías escrito el cuento…
Me costó trabajo encontrar las imágenes perfectas que calaran en “Lo que no traen los periódicos”. Sobretodo por lo difícil que fue encontrar en la Internet fotos sensuales, sin llegar a ser “violentas”.
Y hoy, luego de casi tres semanas, recién puedo cumplir con tu pedido. Ahora tu cuento invita a la imaginación del lector por sí mismo; sin embargo, bien teeeeeeeeerca soy, y no quisiera borrar completamente del todo dichas imágenes, así que las saco del cuento y las coloco en este post dedicado a ti, de nuevo.
Y conciente de que eres un crítico excepcional de la belleza en todas sus formas, también te presento imágenes de aquellas mujeres que causaron y que aún causan impacto (obviamente, la mayoría de ellas son de tu época…)
Agradecimientos especiales: A la galería del Hi5 de Heduardo, quien decidió crearse un blog para llamar la atención de su vecina.
Y con la esperanza de que se puedan ver las imágenes… sino, ni modo!
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