Medio en juego y más en chanza se me ocurre este post, gracias a la sugerencia del Caballero de la Orden de Templarios de Barranco, quién confió en mí para desarrollar este peliagudo tema.
Dado que Perulandia entra en etapa pre electoral, Twitterlandia también requiere ponerse a Derecho y elegir a sus autoridades. Después de idas y vuelta, vueltas y revueltas hemos llegado a la conclusión de que no, no, no podemos seguir en esta anarquía twittera, sin más son que nuestra intuición y necesidad de monologar… necesitamos de un “Presidente”; sí, un presidente con tradicición bloguera (de preferencia), que defienda !nuestros intereses, nuestros territorios, nuestras ideas!
Así que dado este llamado popular, he pensado en un símil casi tan patético como el de nuestra realidad.
¿Cómo será nuestro Presidente? Podríamos buscar a un caudillo soñador, a un caudillo dictador, a un lassez faire lassez passer! Pregunté. !Queremos un Presidente, un Gran Dictador! Gritaron las ranitas twitteras.
Empecemos por los requerimientos físicos: importantísimo: la sonrisa perfecta, la mirada ganadora, el verbo que jale masas de tweets, aquel que no se corra y salga al frente con un post, de esos que chorrean !sangre! Que tenga muchos seguidores, sí, y debe ser internacional, nada de locales pueblerinos, no, no, no, !hombre del mundo virtual! Nuestro presidente debe ser guapo, (sugerencia: fotito mejorada, use photoshop). No está de más decir “Abstenerse chicas”, dado que el machismo también se impone en el mundo virtual: ellos estaban primero, ellos manejan bien las TICs, ellos son la mayoría, ellos manda. Grita la masa twittera: “queremos un hombre con las gafas bien puestas”. Aplausos. Y tendrá sus seguidores que lo retwitearán, y tendrá fans que lo seguirán y aumentarán sus folllowers, y tendrá fuerza de choque que lo defenderá; sí , porque la puyas empezarán pronto. Cuántos bloqueados encontraremos en el camino, cuántas muertes de twitteros que se enfrentarán por defender a su candidato Presidente, repartición de virus por doquier… mala leche, penumbra inundará nuestro mundo virtual.
Twitterlandia se llenará de pancartas, de ofrecimientos, de acomodos (quizá, de repente, un espacio en un starblog, una empujadita con RT para la notoriedad, cuánto se prometerá. Y la masa twitwera estará sedienta, a la espectativa, con los ojos inyectados de pasión al ver a los candidatos desfilar. Sin tapujos se enviarán post cada vez más ácidos, cada vez más atrevidos, más amenazantes… ¿bailarán nuestros nuestros candidatos? Por supuesto, sí, eso les exigiremos, tendrán que hacerlo así tengan dos pies izquierdos, darse su baño de popularidad pues de monopomposos aislados no conseguirán el voto del pueblo twitteriano. Gozaremos de nuestras elecciones y cuando tengamos a nuestro Presidente lo encumbraremos en el blog más alto, más leídos y le pedidremos que postee. Probablemente tengamos un tiempo de enamoramiento idílico, pero pronto él nos dirá que solo él y su grupo posteará y que no hay libertad para postear. Hay que hacer un trámite especial, pasar por una evaluación y esperar.”Pero tú no eres mi amigo, tú no me simpatizas, tú nunca postearás”. Pena de muerte virtual. Allí empezará la gran persecusión. Nos enconderemos en blogs caletas, entraremos en la clandestinidad, cambiaremos de avatar, confabularemos contra el Estado, gozaremos tomando cafés virtuales y bebidas espirituosas, y tweesteando largo y corrido, recordaremos cuando éramos twitteritos anarquistas expropiadores de los tweest de otros, metiendo post tras post tras post y empezará nuestra guerra de guerrillas…pensando en hacer un golpe de Estado.
Dado este cetrino panorama, nos queda preguntar nuevamente, ¿los twitteritos queremos eso? Si a pesar de todo esto insistimos, habrá que pensar en huir del mundo virtual y repatriarse nuevamente en el real, pues en Twitterlandia será virtualmente imposible respirar.

Cabe recalcar que mi blog NO es académico ni político. Mi blog es parte de mi terapia antitwitter. En todo caso, no se sientan incómodos si encuentran entre Uds. algunas semejanzas de las descritas. Recuerden que esto es simple WEB (eo).