Congresista por Puno- Edilberto Curro López

Resulta inadmisible que un padre de la patria represente al universitario pendejo que desea convertirse en “profesional” a costa de influencia, regalos, aceitadas y padrinazgos sin hacer el menor esfuerzo de estudiar, requisito mínimo de cualquier mortal universitario.

El aprobar “como sea” es hoy filosofía de vida de muchos adolescentes, jovenzuelos y hasta profesionales que cursan estudios en la universidad Andina de Juliaca, conocido popularmente como universidad *vacuo. Allá en las aulas los casos más resaltantes son cuestiones negativas de parches, coimas, trueques sexuales y demás leyendas urbanas hechos realidad en la casa de estudios que costó sangre, sudor y lágrimas a miles de juliaqueños que financiaron con sus recursos su creación.

El emblemático caso de un estudiante que quiso convertirse en ingeniero con 3 años de estudio llamó la atención de la comunidad universitaria; sumado a la estudiante de Farmacia que aprobó 14 cursos en un año; y ahora la situación del congresista magisterial Edilberto Curro López que, aplicando el método soy esto y quiero esto, pretende convertirse en hombre del derecho sin sudarla ni asistir a clases, tal como se denunció públicamente.

La norma universitaria de la UANCV da cuenta que todo estudiante debe asistir, por lo menos al 70% de labores dictadas, es decir 11 semanas de los 16 existentes en un semestre de 4 meses; hecho que nunca pudo cumplir el congresista.

Siendo bondadosos podemos suponer que el congresista asistió a clases los días de representación parlamentaria, 1 semana por mes, podríamos manifestar que logró asistir 4 semanas a clases; es decir lejos del requisito exigido para ser tomado en cuenta para los exámenes finales, hecho que fue corroborado por sus propios compañeros y rector de esta cada de estudios.

Este hecho es una clara muestra que la pendejada, criollada y la viveza recorren también las venas de los altos mandamases, de los hijos de mamá o ingenieros expertos en sacarle la vuelta a todo; sin importarles que se engañan a sí mismos, a la comunidad estudiantil y consecuentemente al país.

Podemos concluir entonces que la filosofía “como sea”, no es un asunto propio de los universitarios de la UANCV, es una postura que asumen muchos en diversas circunstancias de la vida, estudian como sea, viven como sea, trabajan como sea, traen hijos al mundo como sea y finalmente mueren como sea.

Los hechos mencionados son cuestiones puntuales y comprobadas, generalizar que todos van por el camino corto sería distorsionar la realidad. Aquí no hay ánimo de fregar la vida a los buenos y loables profesionales salidos de los claustros universitarios de la UANCV; claro está que en todos los lugares se cuecen habas, pero lo de la Andina ya es un asunto que sobrepasa todos los límites de la educación universitaria.

*Persona sinvergüenza o despreciable, tonta, estúpida, pusilánime. (RAE)

*Vacío, falta de contenido.